La economía circular es un modelo de economía regenerativa en el que las materias primas vuelven al ciclo natural o al ciclo productivo.
Las emisiones de CO2 generadas en la transformación de los productos, también pueden volver al ciclo natural (retención en biomasa) o al productivo (productos químicos, de construcción, etc...).
En el proyecto LIFE CO2IntBio, los gases procedentes de una central de generación eléctrica y térmica con biomasa (producción renovable), son capturados, depurados y reutilizados como materia prima que vuelve al flujo productivo.
Además de ser un ejemplo de integración industrial, se crean sinergias entre las industrias participantes haciendo que sus procesos sean más eficaces y sostenibles.